Liv Zaretzky tras los pasos de adolescentes que sanan con la música en “Pibas del viento”

Tras Extramuros, la realizadora se sumerge en el mágico universo de una orquesta juvenil para desmenuzar, en el día a día, cómo se construyen las identidades y sentido de pertenencia de sus integrantes, en un sólido film que habla sobre sueños y amistad.

Finalmente llegás a sala con la película…
Feliz, muy contenta, es algo super inesperado, la película había quedado en BAFICI de 2020, luego se suspendió, habíamos pensado en una función con los chicos de la orquesta al aire libre, así que al suspenderse fue un bajón, después hicimos un preestreno para recaudar fondos para las familias de los chicos, y por ese pre estreno nos quedamos fuera de la edición de este año. Pero ahora poder verla en el cine es la realización del sueño, y cuando nos contactaron para avisarnos esto nos emocionamos.

Estuvieron en otros festivales y la película muestra el trabajo que se hace en el club…
Sí, estuvimos en el FICDH, y ahora estrenando, contenta y esperando que se vea.

¿Cómo llegaste al club?
Mi cuñado es uno de los fundadores de la orquesta, la conocí a través suyo, pero hubo una nota que escribieron en 2015 por la idea de quitar el apoyo, muy lindo sobre la importancia del espacio y me interesé, me acerqué y me enamoré del lugar, de lo que sucedía allí, fui mucho tiempo como espectadora y generando vínculo con la familia. Así llegué.

¿Se complicó elegir a las “guías” del relato?
No, fue super natural y de movida tuve claro que iba a ir por ese lugar. Hugo Lobo, líder de Dancing Mood es el profesor, y no quería hacer un relato desde los adultos, sino desde las chicas, eso estaba claro desde el principio. Esa primera decisión me sirvió para encontrar a quienes presentar, y estas chicas eran las más grandes, las que tenían identificación con el club y un poco las que llevaban las batutas, además tenían una edad que me interesaba, dejando la niñez y entrando en la pubertad, fue natural que sean ellas, en seguida pegamos onda, empezamos a charlar, les gustó la idea y se fue generando todo juntas, no es que hubo otras que elegí, de movida fueron ellas tres.

Hubo una previa pero ¿cuánto tiempo duró el rodaje?
Con Flor, la productora, fuimos sin cámara como un año, y a filmar fuimos desde septiembre hasta fin de año, tres meses de registrar ensayos, porque también queríamos capturar la muestra de fin de año, eso lo teníamos en claro.

¿Vieron la película?
Sí, llegamos a hacer una función en DAC antes de entrar en post producción, al terminar el montaje, porque quería que la vieran para asegurarnos que esté todo bien, no quería que queden expuestas de una manera que no les guste verse. Cuando hicimos la función para recaudar fondos, también la hicimos para que la vean porque estaban muy ansiosos, en el festival también la vieron, así que la mayoría ya la vio.

¿Cómo creés que ayuda la película a visibilizar el trabajo de estas organizaciones que acompañan a niñes creando su identidad?
Uno de los objetivos de la película es que esto se replique, para que existan más espacios, ante la ausencia del Estado para generarlos, que antes, otras realidades se encontraban en la escuela, y en la pública, y hoy eso no pasa. En estos espacios de encuentro, de vecinos, conociendo otras realidades, ayudaría a una sociedad mejor, y desde ahí quisiera que se lea la película, desde la solidaridad con personas que convivimos, conociendo al que tenés cerca.

Y de saber qué está pasando en otros lugares…
Sí, y también me gustaría que llegue a un público adolescente, con historias con las que pueden sentirse identificades y cercanos. Además, que la gente más grande vea historias de pibas de ahora y que se puedan conocer, y que desde esa curiosidad yo la hice, de saber qué cosas les gustan, las motivan, desde algo muy llano, desde ahí me gustaría que se reciba, acercándose a otras chicas o chichos que puedan estar en situaciones parecidas y les puedan tender una mano.

¿Estás trabajando en algún nuevo proyecto?
Estoy escribiendo un nuevo proyecto, Nadar en lo profundo, pero la protagonista vive en España, entonces estamos viendo cómo conectarnos, estoy empezando a escribirla, aunque viene medio lenta la cosa. Además, sigo produciendo, lo nuevo de Melina Terribili, otra de Luciana Terribili y la nueva película de Laura Linares.