“Permitidos”, una comedia teatral veraniega sobre la complejidad de las relaciones y los deseos reprimidos

Si tenés pareja estable, pero podés concretar un encuentro amoroso con tu deseo famoso, ¿contaría como infidelidad? Esta pregunta se la hicieron los personajes protagónicos de la película Permitidos, Camila y Mateo, interpretados por Lali Espósito y Martín Piroyansky en 2016, bajo la dirección de Ariel Winograd. Este verano 2024, se hacen ese interrogante los mismos papeles ficticios, ahora interpretados por Rocío Igarzábal y Mike Chouhy, en una obra de teatro que lleva el mismo título del film, es dirigida por Peto Menahmen y se presenta en el Paseo La Plaza.

La premisa entre la comedia cinematográfica y la teatral es la misma. Camila y Mateo son una pareja de enamorados que comparten una profunda conexión, hasta que se ven envueltos en una encrucijada inesperada. Durante una cena con amigos, surgen las intrigantes conversaciones sobre sus amores "permitidos" famosos. Aunque, en principio, en sus vidas reales, eso sería imposible, ya que esas personas son inalcanzables, el destino toma un giro sorprendente.

Mateo se cruza accidentalmente con su "permitida", Zoe Del Río (Liz Solari, Sofía “Jujuy” Jiménez), y ese encuentro fortuito se convierte en una experiencia que pone a prueba los cimientos de su relación con Camila. Más tarde, es Camila quien conoce a su “permitido”, Joaquín Campos (Benjamín Vicuña, Juan Sorini). Así, los personajes exploran la complejidad de las relaciones de pareja, los deseos reprimidos y la vulnerabilidad humana en un mundo donde las tentaciones están al alcance de la mano.

Si bien la adaptación escénica, a cargo de Nelson Valente, sigue la estructura narrativa del largometraje y recrea populares escenas (la del ataque de furia de Camila, apodada en redes como “la loca del cartel”, o la del karaoke en el bar con la interpretación del hit "Rata de dos patas", de Paquita la del Barrio, por parte de la protagonista a su ex), también hay ciertas licencias para lograr el fluido desarrollo de la propuesta teatral.

Por ejemplo, resultan importantes las incorporaciones de los distintos personajes secundarios a cargo de Paula Staffolani, Abril Suliansky y Agustín Vidal Rossi para sintetizar las acciones de los diversos papeles complementarios en el filme. Uno de los cambios más notorios es el de la aparición de la vendedora de alfombras que no solo logra constantes carcajadas en la platea por su desparpajo e impredecibilidad, sino que, a su vez, anexa diferentes situaciones, como el robo disparador de los enredos hasta el fanatismo por uno los “permitidos”.

Por último, la escenografía corpórea permite la inmersión, tanto de los personajes como de los espectadores, en algunos de los principales escenarios del largometraje, como son el hogar de Mateo y Camila, la casa de Zoe, el bar del karaoke, la calle y el cartel publicitario, la alfombra roja del evento en el que se reencuentran los protagonistas y el hospital, entre otros sitios.  

Tomar nota

Permitidos se presenta en la sala Pablo Neruda del Paseo La Plaza (Av. Corrientes 1.660, Capital Federal) los viernes (20.30 horas), sábados (21 horas) y domingos (21 horas). Las entradas se pueden conseguir a través de Plateanet.