Crítica de “Bigli”, el antihéroe de Nicolás Tacconi protagonizado por Luis Luque

Bigli (Luque) acaba de perder a su esposa y pasa sus días de borrachera en borrachera. Lo echan de su trabajo y vive endeudado en su barco amarrado al muelle. Curiosamente algunas personas aprecian a Bigli a pesar de su carácter autodestructivo y petulante, pero será su sobrina quien le solicita su ayuda y de manera errática este antihéroe buscará la salvación. O no.

Bigli (2021) es una película errática como su personaje principal. Esto se debe a que el film juega al límite con sus tonos y registros que van del thriller al drama pasando por la comedia. La película comienza con el dolor de Bigli por su difunta esposa, pasa al melodrama cuando choca en carácter con su cuñada y vira a la comedia cuando seduce al personaje de María Onetto. 

Sobre el final se perfila el relato del héroe impensado y es en donde la película mejor funciona, a este género no se le reclama tanta verosimilitud en las actitudes de los personajes sino que depara en la acción corporal, ahí donde Luque y la película mejor se desenvuelven. Las escenas del barco y viajes en auto son las mejor filmadas y producidas, en una trama que avanza con mayor solidez sobre camino conocido.

Luis Luque compone a su particular perdedor de manera estrambótica, con una actitud contestataria subversiva de choque con el resto de los personajes. En algunas escenas lo logra, cuando se emborracha en el bar, cuando habla con la monja, pero en otras roza lo grotesco, en una versión dramática de su personaje de Pájaros volando (2010). Funcionan muy bien los pasajes “de baile” en una extraña y ocurrente mezcla entre Guasón (Joker, 2019) y Otra ronda (Duk, 2020).

También hay que decir que Luque está muy bien acompañado por un elenco sorprendente que reúne a Ana Celentano, Esteban Bigliardi, Laura Grandineti, Rocco Posca, Ana Katz y Fabián Arenillas, mientras que también aparecen brevemente Guillermo Arengo y María Onetto. El oficio de los actores dan credibilidad a la aventura cinematográfica.

Bigli es una película despareja que toma la grata decisión de no tomarse en serio la historia que cuenta y se recuesta sobre el carisma de su impredecible personaje.