Crítica de "Ella es Cristina", debut de Gonzalo Maza, guionista de Sebastián Lelio

La historia que el ex periodista y crítico de cine devenido primero en guionista y ahora en realizador audiovisual eligió para debutar en la dirección es una de esas que no pudo concretar junto a Lelio, lo que le permite mostrar de manera más directa su propia voz, pero manteniendo algunos rasgos que ya había expuesto en sus trabajos anteriores como el interés por retratar personajes femeninos en una sociedad patriarcal.

La trama se centra en Cristina (Mariana Derderián), una joven mujer treintañera, recién separada de Rubén, un caricaturista exitoso que opaca su carrera, que comienza una relación tóxica con Rómulo, un profesor de teatro. Esos avatares la llevan a distanciarse de Susana (Paloma Salas), su mejor amiga y la única que se preocupa por ella, y que también enfrenta una crisis personal con los hombres de su familia.

Con una paleta monocromática y su narrativa afín a Frances Ha (2012) de Noah Baumbach e incluso al cine de John Cassavetes, Ella es Cristina se estructura como una comedia existencialista que se nutre de todos los tópicos del cine independiente norteamericano para mostrar un mundo cargado de arte, pseudo intelectualismo e ironía, pero siempre empatizando con los dramas personales que rodean a sus personajes.

Protagonizada por las extraordinarias, y opuestas, Mariana Derderián y Paloma Salas, que explotan al máximo cada una de las líneas de diálogos y emplean una gama de matices que hacen creíble lo increíble, Ella es Cristina supone un auspicioso debut en la dirección para Gonzalo Maza, quien muestra un fresco generacional sobre mujeres ahogadas por un machismo ególatra y torpe que aún impera en buena parte de la sociedad chilena, latinoamericana e incluso mundial.