Crítica de "Hazme el favor", todo por un auto

Hazme el favor (No Hard Feelings, 2023) está protagonizada por Jennifer Lawrence -Los Juegos del Hambre (Hunger Games, 2012-2015), El lado luminoso de la vida (Silver Linings Playbook, 2012), Joy (2015)- a quien, dejando de lado un par de películas de streaming, no veíamos en pantalla grande desde X-Men: Dark Phoenix (2019). Este filme presenta un claro ejemplo de cuan efectivo es el sistema de estrellas para atraer al público hacia la obra. Probablemente si no estuviese protagonizada por una figura del mainstream como Lawrence, este estreno pasaría totalmente desapercibido. La comedia en cuestión es dirigida por Gene Stupnitsky -autor de 15 episodios de la serie televisiva The Office y los largometrajes Malas enseñanzas (Bad Teacher, 2011) y Año uno (Year One, 2009)- quien escribió el guión junto a John Phillips. 

La historia se centra en Maddie (Jennifer Lawrence), una joven treintañera poco convencional, que está a punto de perder su casa de toda la vida. La propiedad tiene para ella tiene un valor especial, porque atesora el legado de su madre quien ha fallecido y es el único lazo afectivo que conoció, nunca tuvo vínculo con su padre, y eso es prácticamente todo lo que sabremos. Luego de perder su auto, que es su herramienta de trabajo, ella descubre un interesante anuncio de trabajo: "padres adinerados buscan a alguien que tenga citas con su introvertido hijo de 19 años". Los padres de Percy (Andrew Barth Feldman) quieren que el joven se avispe antes de ir a la universidad. 

Mientras Maddie piensa que será fácil ganarse el auto teniendo sexo con el adolescente, descubrirá que la tarea no es tan sencilla. En dicho sentido, el filme es una especie de reescritura de la comedia romántica, ya que con varias características del género resulta ser una comedia, pero sin romance. Es entretenida y sus chistes son efectivos. Un aspecto interesante del largometraje, es la inversión de roles que se da, mientras se supone que ella es la maestra, al final Percy también le enseñará muchas cosas de la vida a Maddie, como a tener empatía y ser más considerada con los demás, destrabará sus bloqueos emocionales y sus ganas de salir de su zona de confort. Asimismo, el filme funciona como una novela de aprendizaje para ambos personajes, Percy emprenderá camino hacia la adultez y Maddie se arriesgará en busca de un nuevo destino para madurar. 

El relato también reflexiona sobre los cambios en el urbanismo y cómo ciertos pueblos o ciudades son afectados por el negocio turístico. Además, esboza choques culturales interesantes entre las generaciones de los “millennials” y “centennials”, los cuales producen gracia apelando a la identificación del público. Si bien Hazme el favor remite en su premisa a Soltero en casa (Failure to Lunch, 2006) protagonizada por Sarah Jessica Parker y Matthew McConaughey, el estreno es una propuesta pasatista que le hará pasar un buen rato al público. En conclusión, Hazme el favor es una entrega más de “cine-shampoo” que no sorprende, pero resulta efectiva como mero entretenimiento.