Crítica de “Santa Evita” la máxima ganadora de los primeros premios Cóndor de Plata a las series

Santa Evita (2022), la miniserie de 7 episodios, imagina el calvario sufrido por el cuerpo embalsamado de Eva Perón después del golpe militar que derrocó al General Juan Domingo Peron. El gran nivel técnico de la producción la hizo quedarse con los premios al mejor maquillaje y peluquería para Clarisa Reynoso, mejor fotografía para el gran Felix Monti, el mejor diseño de arte para Mercedes Alfonsín, vestuario Beatríz Di Benedetto, montaje Rosario Suárez y Ana Remón, y música original Federico Jusid.

Natalia Oreiro, que personifica a Evita y también fue reconocida por su trabajo, es el eje de un relato de hombres obnubilados (en el peor de los sentidos) a su alrededor. Los intentos de “poseer”, “perpetrar” e incluso “mutilar” el cuerpo de la mujer, marcan el tono de un relato que dimensiona las presiones y abusos ejercidos hacia la mujer en un universo netamente masculino. Evita se muestra cómo un icono en términos sociales, políticos e históricos pero, sobre todo, en términos femeninos.

Cada uno de los episodios está dedicado a un hombre diferente alrededor de Eva. Peron (Darío Grandinetti), el Coronel (Ernesto Alterio), el embalsamador (Francesc Orella), el empleado del cine (Damián Canduci), el periodista (Diego Velázquez), etc. Hombres obsesionados por controlar a la mujer tanto en vida como después de muerta. Un control que jamás tendrán por la dimensión extraordinaria -e inexplicable- generada a su alrededor.

El gran villano del relato es el Coronel Moori Koenig que personifica Alterio, un tipo repleto de odio hasta los límites de la locura. Una lectura interesante de la serie es que el odio no le sirve para destruir a un otro sino que lo carcome por dentro, internamente. Por eso la obsesión se mezcla con la locura que deteriora física y psicológicamente al personaje de manera paulatina a lo largo de los 7 episodios.

Hay tres tiempos narrativos que se articulan por montaje en esta serie dirigida por Alejandro Maci y Rodrigo García, ambos también premiados. El mencionado periplo del cuerpo (son 4 en la serie, el verdadero y tres réplicas) a partir del ‘55 y los hechos acontecidos en la década del setenta cuando un periodista, con muchos parecidos a Rodolfo Walsh, investiga sobre el destino del cadáver.

Santa Evita también cuenta la historia biográfica de Eva Perón y su llegada al poder, su rol social en la fundación, sus luchas dentro del gobierno; en una serie que no busca hacer un posicionamiento político partidario sobre su figura, sino dimensionar sus luchas por los derechos de las mujeres.