Lucrecia Martel alerta en Diputados sobre cambios propuestos en la Ley Ómnibus

En una intervención frente al plenario de comisiones de Diputados, la renombrada directora de cine Lucrecia Martel, representando a la Industria del Cine argentino, expresó su inquietud respecto a las modificaciones propuestas en la ley ómnibus. Martel señaló que estas enmiendas parecen haber sido redactadas por individuos con prejuicios hacia la industria cinematográfica.

Durante su presentación, Martel enfatizó la importancia económica del cine en Argentina, destacando que entre el 70% y el 90% del presupuesto de una película argentina se financia exportando derechos, compitiendo en fondos internacionales con producciones de todo el mundo. Naciones como Brasil, España, Colombia, Francia, Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, China, Qatar y Corea del Sur, así como inversores privados, colaboran de manera habitual con la industria del cine argentina.

La cineasta resaltó que la clave del éxito de la industria cinematográfica en Argentina ha sido la existencia de una ley de cine que regula el funcionamiento del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA). Martel hizo hincapié en la importancia continua del INCAA, a pesar de las críticas a lo largo de diversas administraciones, ya que este organismo ha sido esencial para la organización de gestiones internacionales y cuestiones bilaterales que permiten estructurar la actividad cinematográfica del país.

Martel también mencionó las escuelas de cine vinculadas al INCAA, subrayando la relevancia de estas instituciones para la formación de técnicos que contribuyen al desarrollo regional al ingresar al mercado laboral en la televisión local o en la producción cinematográfica.

En relación con los cambios propuestos en la ley ómnibus, la directora expresó su impresión de que no se ha consultado lo suficiente con el sector cinematográfico y sugirió que las modificaciones han sido redactadas sin un entendimiento profundo de la industria. Martel alertó sobre las posibles consecuencias negativas de estas propuestas, destacando que podrían obstaculizar el acceso a fondos internacionales y afectar el crecimiento sostenido de la industria del cine en el país.

Finalmente, Martel propuso que las leyes relacionadas con el cine se discutan en un momento en el que el Gobierno haya adquirido un mayor conocimiento sobre el funcionamiento de la industria cinematográfica nacional, con el objetivo de comprender las necesidades reales y evitar normativas improvisadas que puedan perjudicar al sector.

En otra instancia, el lunes, la productora Vanessa Ragone (El secreto de sus ojos) y el director de la aclamada película Argentina, 1985, Santiago Mitre, también se presentaron ante las comisiones de Diputados para subrayar que "el cine no pide plata". Mitre destacó la importancia de la Ley de Cine y su contribución al éxito internacional del cine argentino.

"No sé si lo sabían, pero Argentina es el país que más nominaciones al Oscar tiene de la región. ¿Por qué sucede eso? Porque hay una Ley de Cine que sostiene y fomenta la existencia de un cine argentino. Las películas argentinas se exportan a todo el mundo, son reconocidas en todo el mundo, generan divisas, trabajo de calidad y valor agregado, le dan visibilidad a nuestro país, generan admiración", expuso el ganador del Globo de Oro a mejor película en lengua extranjera en 2023.

El realizador explicó que "los últimos 30 años han sido, fuera de cualquier duda, los mejores del cine argentino de su historia", ya que se trató de "la primera vez que el cine argentino ocupó un lugar importante y sostenido a nivel internacional".

La 'ley ómnibus' continúa su camino en las comisiones del Congreso con vistas a su futuro debate en Cámara. El Ejecutivo espera que su proyecto estrella quede aprobado antes de fines de enero.