El retiro

Bird Island

Hay en Bird Island (L’île aux Oiseaux, 2019), que se puede ver en Mubi, una promesa que se mantiene durante todo el relato, el que, con una nostalgia que atraviesa a toda su propuesta, permite acercarnos al trabajo desde un lugar inefable, exigiendo al espectador un nivel de compromiso con aquello que propone para dimensionar realmente aquello que desea transmitir. 

Bird Island
sábado 12 de septiembre de 2020
Tal vez sus directores Maya Kosa, Sérgio Da Costa hayan comprendido que ese sentimiento por aquello que ya no se tiene, lo que se perderá, pero también la sensación de lo nuevo, impregnado en cada una de las escenas, favorecería el visionado para así traspasar su carácter observacional, potenciando la íntima historia que se construye sobre el trabajo, las personas, y la vocación.En una sociedad capitalista, el trabajo puede, en pocas oportunidades, responder a una vocación, o, si lo hace, el camino para alcanzar el objetivo es largo, con obstáculos y requiere mucho esfuerzo. Pero ¿qué pasa cuándo nunca se imaginó o deseó una ocupación? La película responde de manera específica a esta pregunta, con el acompañamiento de Paul y Antonin, un hombre a punto de jubilarse y un joven que nunca ha en su vida, pero que necesita un norte en su presente.La cámara de Maya Kosa y Sérgio Da Costa, se reposa en el centro ornitológico de Genthod, en Ginebra, Suiza, un lugar en el que se recuperan animales, pero también personas, o al menos es lo que se demuestra a partir de la figura de Antonin, quien tras una larga enfermedad se incorpora al lugar para heredar el trabajo de Paul, un hombre que a lo largo de toda su vida supo cómo llevar adelante las tareas de mantenimiento del espacio sin preguntarse mucho por ellas.Por otra parte se presentan a Emilie y Sandrine, médicas veterinarias que diariamente se esfuerzan para salvar la vida de aquellas aves que, por diversas razones, llegan al centro para ser analizadas y curadas. Todos son presentados de manera detallada, en acción, con una mirada que intenta ser objetiva pero que a su vez plantea la necesidad de permitirse por momentos la digresión con la incorporación de imágenes mediatizadas de algun animal, con su calor emitido en un estudio, o la banda sonora que quiebra la linealidad del aquí y ahora de los protagonista.Bird Island es una película de silencios, de acompañar procesos y rutinas, con el trabajo como tema principal que se reposiciona en los mecanismos que el propio lugar sostiene como válidos, para continuar con tareas complicadas y que exigen, a la hora de realizarlas, una dedicación que excede a la mera vocación o designación de tarea.El presente como continuo laboral, el futuro incierto como posibilidad de una nueva vida ante el fin de un ciclo, todo atraviesa la película, permitiéndose, además, reflexionar sobre el trabajo, su manera de aprenderlo y aprehenderlo y también sobre el proceso de un individuo como parte de una fuerza laboral mucho más grande, aún con vocación y sentido del oficio.Y en el medio del relato la naturaleza, esas aves que siendo rescatadas y curadas regresan por sentirse más protegidas dentro del lugar que en libertad en su entorno, roedores que habitan sus espacios antes de morir para ser alimentos de las aves, como Paul, dejando su trabajo para que nuevas camadas asuman el lugar que la sociedad y el capitalismo le designaron en la cadena alimenticia de la economía. 
8.0
Te puede interesar
Últimas noticias
MÁS VISTAS