2023-06-01

CCGSM

Crítica de "Nunca hizo tanto frío", sobre madres e hijas

Nunca hizo tanto frío se caracteriza por capturar la complejidad de la naturaleza humana en la relación entre una madre y una hija. Violeta se embarca en un viaje emocional y personal de descubrimiento, adentrándose en las profundidades de la esencia de Cora. A medida que Violeta se sumerge en la historia, su propia identidad se entrelaza íntimamente con la de su progenitora, revelando una conexión profunda y poderosa.

Uno de los aspectos destacados de Nunca hizo tanto frío es su habilidad para capturar la intimidad de esta relación especial. A través de la lente, Uman logra transmitir una sensibilidad excepcional al abordar temas universales en el contexto de esta relación íntima. Su habilidad para capturar momentos crudos y sinceros, sin caer en la sentimentalidad excesiva, es notable. Este enfoque en la relación permite a la película profundizar en las complejidades de los lazos familiares y resaltar la intrincada red de emociones, experiencias y secretos compartidos que moldean la experiencia humana.

Si bien Nunca hizo tanto frío es una película que aborda una temática personal, su verdadero poder reside en su capacidad para evocar una resonancia universal. Esta obra explora la complejidad del amor filial, invitándonos a reflexionar sobre nuestras propias relaciones familiares.

Te puede interesar