CINEAR - 8 Puntos

Crítica de "El cielo otra vez" y el símbolo sagrado

Lo interesante de los documentales es la capacidad de poner al espectador en contacto con historias que hasta el momento le eran desconocidas. Esto es lo que consigue justamente Gustavo Alonso (La vereda de la sombra, 2003), con "El cielo otra vez" (2013), en donde logra exitosamente familiarizar al espectador con el cóndor Andino, un animal que suele no ser el favorito cuando visitamos el zoológico.

Crítica de "El cielo otra vez" y el símbolo sagrado
miércoles 21 de mayo de 2014

El documental nos enseña que el cóndor se convirtió con los años en un verdadero desafió de conservación. De todos modos, El cielo otra vez vez no gira únicamente en torno a lo que este animal representa y a su riesgo de extinción, sino que se centra en el proyecto llevado a cabo por el Dr Luis Jacome, (gerente del Zoológico de Buenos Aires y Director del programa de conservación Cóndor Andino), llamado “Proyecto cóndor” que consiste en la incubación y cría de pichones en cautiverio y su liberación año tras año en la sierra de Pailemán.

A través de entrevistas, del registro diario de la vida del cóndor y del trabajo que realizan Luís y el resto de su staff, el espectador conoce y se involucra cada vez más con este proyecto y su objetivo. La dedicación y pasión que cada una de estas personas (algunos incluso voluntarios) invierten en el trabajo, conmueve, y refuerza el interés hacia el mismo. Un ejemplo de esto podemos verlo en una de las escenas más íntimas del documental, en donde el espectador se inserta en el mundo de un cóndor que no sospecha que está siendo observado, y la cámara entra y registra las acciones del pichón, mientras presenciamos el meticuloso trabajo de Luís.

Otro elemento al que el documental presta especial atención, consiste en mantenerse fieles a la tradición que envuelve a la figura del ave, motivo por el cual se presencian los rituales mapuches: pedirle permiso al cóndor cada vez que se retira uno de sus huevos y el agradecimiento por el nacimiento, entre otros gestos relacionados a la “cosmovisión”.

El cielo otra vez tiene un enfoque definido (una de las fallas más notorias que encontramos a veces en el género) y consigue con esto, no solo atraparnos desde el punto de vista cinematográfico sino además, concientizarnos sobre un proyecto que no puede pasar desapercibido.

8.0
Te puede interesar
Últimas noticias
MÁS VISTAS