2009-04-16

Trasgresión Cero

La Muerte en vivo

La idea de la productora de TV Katy (Eva Mendes) es realizar el Reality Show con mayor rating jamás hecho, sin importar cuestiones morales ni éticas. Para ello, se embarca en la producción de un Reality cuyo juego para descalificar concursantes consiste en que cada participante se lleve un arma a la cabeza –que contiene una sola bala- y gatille el arma. El que pierda la vida, pierde el juego. Sobre el final La Muerte en vivo pierde la línea de crítica ácida al mundo televisivo que realizaba hasta el momento, convirtiéndose en el propio Reality. Ya no vemos el backstage del programa y las ideas perversas planteadas para su desarrollo, sino que estamos presenciando el programa mismo. Toda la tensión generada en la película está puesta en mostrar aquello que criticaba. Para colmo de males, y como todo film conservador, sobre el final hay justicia divina, el malo recibe su castigo y todo queda en orden como al comienzo. Hay una enseñanza sobre que esta bien y que está mal, dejando toda posibilidad de crítica al sistema televisivo de lado, transformando una idea interesante en un cuentito con final feliz. Ahora sabemos porque Estados Unidos no se atreve a estrenarla... Nota: el juego “la ruleta rusa” fue inmortalizado en el cine en 1978 por Michael Cimino en el film El Francotirador con Robert De Niro y un desquiciado Christopher Walken.
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