Crítica de "Banel & Adama", prometedor debut de Ramata-Toulaye Sy

Banel, una viuda joven del tío de Adama, se ve obligada por la tradición a casarse con el heredero joven del esposo fallecido. Sin embargo, en el trasfondo de esta imposición, encontramos que Banel y Adama se aman desde su adolescencia y ven esta situación como una oportunidad para estar juntos. Su amor es palpable a lo largo de la película, mientras cuidan de los animales y trabajan la tierra, anhelando escapar del pueblo y vivir su vida de forma independiente.

Uno de los aspectos destacados de Banel & Adama es el debut de la joven pero experimentada directora Ramata-Toulaye Sy. Con formación en la prestigiosa escuela de cine francesa Femis y experiencia en la escritura de guiones, Sy trae consigo un enfoque fresco y prometedor. Sin embargo, también se pueden percibir influencias de otros cineastas africanos en su obra, como Idrissa Ouedraogo de Burkina Faso y Souleymane Cissé de Malí. Estos directores han explorado temas similares, como los matrimonios forzados y la dinámica de las comunidades africanas, aportando una rica tradición cinematográfica a la región.

Banel & Adama se destaca por su estética poderosa. Los decorados son visualmente impactantes y los colores de los vestuarios contribuyen a caracterizar a los personajes de manera similar a un cuadro impresionista. Sin embargo, en ocasiones, estas decisiones estéticas pueden parecer un tanto artificiales y alejarse de la autenticidad que se espera en una película que retrata la vida en un entorno rural y tradicional.

A pesar de estas pequeñas críticas, Banel & Adama logra transmitir la resistencia y la determinación de una cultura que busca sobrevivir y encontrar el bien en medio de tiempos difíciles. La historia de Banel y Adama nos muestra cómo el amor puede convertirse en una decisión social y no solo en un sentimiento personal, y cómo las personas luchan por su identidad y su libertad en un mundo lleno de restricciones.

En definitiva, Banel & Adama es un debut prometedor para la directora Ramata-Toulaye Sy, quien aporta una perspectiva fresca y una estética visual impactante a la cinematografía africana. Aunque algunas decisiones estéticas puedan parecer artificiales, la película logra transmitir temas importantes y conmovedores que resuenan en la cultura y la identidad africana.