La Inteligencia Artificial en el cine y las series

Metrópolis (1927), dirigida por el alemán Fritz Lang, es una de las primeras películas que retratan la inteligencia artificial en el cine. La trama se desarrolla en una ciudad industrial dividida en clases, cuya estructura es dinamitada por el robot María, diseñado a imagen y semejanza de una mujer. Esta película constituye un retrato primitivo pero icónico de la IA en la cultura popular.

Otra película destacada que aborda el tema de la IA es Ella (Her, 2013), dirigida por Spike Jonze y protagonizada por Joaquin Phoenix y Scarlett Johansson. La trama se enfoca en las relaciones entre humanos y sistemas de IA, y cómo la tecnología puede afectar la vida personal. Mientras que Blade Runner (1982), dirigida por Ridley Scott y basada en la novela de Philip K. Dick, presenta una sociedad en la que los replicantes, androides con habilidades y apariencia humanas, son utilizados para trabajos peligrosos en colonias espaciales. El protagonista, un detective llamado Rick Deckard (interpretado por Harrison Ford), es contratado para cazar a unos replicantes fugitivos en Los Ángeles y se plantea la pregunta de si estos seres artificiales tienen emociones y conciencia, o si son simplemente máquinas programadas para cumplir una función.

En A.I. Inteligencia Artificial (2001), del cineasta Steven Spielberg y basada en un cuento de Isaac Asimov, se presenta una sociedad en la que los humanos han creado robots con apariencia humana y capacidades avanzadas de procesamiento de información. El protagonista es un niño robot llamado David (interpretado por Haley Joel Osment) que es adoptado por una familia humana y busca convertirse en humano para ganarse su amor y aceptación. La película plantea preguntas éticas y morales sobre la creación de seres artificiales con sentimientos y conciencia.

En la saga Matrix, de las Wachowski, la inteligencia artificial ha evolucionado tanto que ha creado una realidad virtual para mantener a los humanos esclavizados y utilizarlos como fuente de energía. El relato transita por temas como la libertad, la realidad y la identidad, y ha sido una influencia en la cultura popular y en la reflexión sobre la tecnología y la IA.

Yo, Robot (2004), también basada en los relatos de Asimov, narra la historia de un detective llamado Del Spooner (interpretado por Will Smith) que investiga un crimen en el que está implicado un robot, lo que lo lleva a cuestionar su propia percepción de los robots y su capacidad para cometer actos malintencionados.

Por otro lado, en Chappie, de Neill Blomkamp (2015), se muestra a un robot con inteligencia artificial que aprende y evoluciona, desarrollando un sentido de la moralidad y emociones humanas. La película plantea preguntas sobre la responsabilidad de los creadores de robots y sobre cómo la IA puede influir en el comportamiento de las máquinas.

En la película Ex Machina (2014), un programador de computadoras es invitado por su jefe a una casa en la montaña para realizar una prueba de Turing en un robot con inteligencia artificial. La película explora temas como la conciencia y la libertad, lo que hace que los espectadores se cuestionen qué significa ser humano. Esta película fue dirigida por Alex Garland, quien también creó la serie de ciencia ficción llamada Devs (2020), que explora temas de inteligencia artificial, conciencia y determinismo.

Devs se centra en una empresa de tecnología que ha creado un sistema de computación cuántica capaz de predecir el futuro y determinar la causa y efecto de los eventos. La serie sigue a un joven programador que es contratado por la empresa y descubre la verdad detrás de la tecnología y los secretos oscuros que se esconden detrás de ella. Al igual que Ex Machina, Devs presenta una exploración profunda de los temas éticos y filosóficos de la inteligencia artificial, incluyendo preguntas sobre la conciencia, la libertad y la responsabilidad moral. La serie ha sido aclamada por su enfoque innovador y su tratamiento riguroso de la ciencia y la filosofía de la IA.

En cuanto a series, Westworld (2016), creada por Jonathan Nolan y Lisa Joy para la cadena HBO, basada en la película homónima de 1973 escrita y dirigida por Michael Crichton, es una de las más populares, ya que se desarrolla en un parque temático de robots con aspecto humano, donde los visitantes pueden vivir sus fantasías más extremas. Westworld ha sido aclamada por su complejidad narrativa y su capacidad para interpelar al espectador sobre el impacto de la tecnología en nuestras vidas.

Otra serie que ha explorado el tema de la IA es Black Mirror (2011-2019), creada por Charlie Brooker y producida por Netflix. La serie presenta una variedad de historias independientes que exploran los efectos de la tecnología en la sociedad. Uno de los episodios más destacados, Be Right Back, cuenta la historia de una mujer que utiliza un servicio de inteligencia artificial para comunicarse con su difunto esposo.

Otra serie interesante es Altered Carbon (2018-2020), que se desarrolla en un futuro en el que los humanos pueden transferir su conciencia a diferentes cuerpos, incluyendo cuerpos de robots. Altered Carbon transita por tópicos como la identidad, la mortalidad y la tecnología de la transferencia de la conciencia.

Finalmente, Humans (2015-2018) es una serie británica que se centra en un mundo paralelo en el que los robots avanzados llamados "synths" se han vuelto comunes en la sociedad. Estos robots humanoides tienen una apariencia y habilidades físicas y mentales similares a las de los humanos, lo que les permite realizar una amplia variedad de tareas.

Las películas y series que abordan el tema de la IA ofrecen una mirada fascinante y provocativa sobre el futuro de la tecnología y sus efectos en la sociedad. Si bien algunas de estas historias son más oscuras que otras, todas buscan interpelar al espectador sobre su relación con la tecnología y el mundo que está creando.