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Crítica de "Great Freedom" y la tragedia de un hombre encarcelado por su homosexualidad

La segunda ficcíon del austríaco Sebastian Meise se alzó con el Premio del Jurado de "Un certain regard" del Festival de Cannes 2021 para más tarde conquistar el Festival de Sevilla, la Viennale, Sarajevo, integrar la terna al Premio Lux de lo mejor del cine europeo y quedar en la shortlisted de los Oscar a Mejor Película Internacional.

viernes 06 de mayo de 2022

El artículo 175 del código penal alemán, que da origen a la película, le otorgaba al Estado el poder de perseguir y encarcelar a los homosexuales acusados de prácticas inmorales. Cualquier actividad sexual entre individuos del mismo género era condenable bajo la ley con sentencias que –durante el régimen nazi– alcanzaban hasta cinco años de confinamiento. 

Great Freedom (Große Freiheit, 2021) se ambienta en la Alemania de la postguerra y tiene como protagonista a Hans Hoffmann (excelente Franz Rogowski), un hombre joven que, tras ser prisionero de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial, es encarcelado en la Alemania Occidental por sus prácticas homosexuales. Viktor (Georg Friedrich) es su homófobo compañero de celda, un asesino condenado a cadena perpetua, con quien termina entablando una relación homoerótica. La historia está narrada entre 1945 y 1968, un año antes de que la  homosexualidad fuera despenalizada.

En Great Freedom, donde el sexo funciona como un elemento de liberación física, pero también como de necesidad emocional, se muestra a Hans, una y otra vez, en la misma cárcel, arrestado sistemáticamente por sus prácticas homosexuales, víctima de un encarcelamiento interno y externo, del cual nunca llegará escapar, pero atravesando tres momentos históricos -1945, 1957 y 1968- y donde la figura recurrente, tanto literal como simbólica, es Viktor, la única persona con la que conecta física y emocionalmente.

Meise, que de manera inteligente se corre del melodrama para evitar todo tipo de sensiblería y efectismos innecesarios, cuenta una historia de fuerte contundencia política, y una línea ideológica inclaudicable, apelando a diferentes líneas temporales, un mismo espacio y un entramado narrativo fragmentado, con bifurcaciones que, si bien en un principio parece que no conducen hacia ningún lado, en algún momento se conectan entre sí para ser determinantes dentro del conflicto planteado y cerrar aquello que parecía forzado.

Great Freedom, que navega entre los laberinticos universos kafkianos y la complejidad existencialista de George Orwell, es mucho más que historia LGBTQI+ o un drama carcelario, es una gran película de amor en todas sus acepciones. Un desgarrador y árido relato que explora la resistencia y la resiliencia del espíritu humano por encontrar una libertad que va mucho más allá de lo físico.

9.0
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