Se rueda “Miranda de viernes a domingo”, la nueva película de María Victoria Menis con Inés Estévez

Miranda de viernes a domingo marca el regreso de María Victoria Menis a la dirección. Se trata de la historia de una mujer que se replantea su vida a partir de la lucha de jóvenes de la escuela donde enseña.

“Cuando de repente escuché a chicas muy jóvenes cuestionar porqué en un noticiero hay diez tipos y una sola mía, o chicas de cine, técnicas muy jóvenes diciendo por qué hay seis jurados hombres en un festival y no mujeres, es como que se te cae un velo y comenzás a cuestionarte miles de cosas. Eso quise contar en la película, el cambio de perspectiva sobre tu futuro", cuenta Menis, en el set de la película a la que EscribiendoCine accedió en exclusiva.

“No me dio ganas de contar si hay malos, villanos, censores o heroínas. Me dio ganas que una mujer común enfrente la situación y le repercuta en su vida cotidiana, en su historia de familia. La violencia física ya la trabajé en otros proyectos míos, como en El cielito, o en La cámara oscura, quise trabajar sobre una visión más común, viendo cómo esas chicas abren los ojos", suma.

Inés Estévez, la protagnista, argumenta sobre el film “me gustó el hecho de ser dirigida por una mujer, en segundo lugar, una mujer como María Victoria, que hace un cine con contenido y sustancia. Y me gustó esa sutil dualidad que existe en los seres humanos, en la vida real, y que acá está tan bien descripta”, dice en el rodaje.

Elvira Onetto cuenta sobre su personaje “es una ex profesora de matemáticas que la tuvo que pelear, con un ex marido director de cine que la engañó, la dejó sola con dos niñas chicas, con una relación bastante complicada con Miranda, con quien de a poco comienzan a entenderse”.

“Nunca había trabajado con una directora de cine mujer, María Victoria tiene una gran capacidad para dirigir a los actores. Tuvimos bastantes ensayos, algo que no sucede frecuentemente. El tema de la mujer en el centro me gusta porque tampoco es panfletario”, agrega.

“Las problemáticas y anhelos de una mujer de cuarenta y largos en una sociedad donde se realza la juventud. Eso también es muy feminista porque habla de cómo se pueden relanzar los sueños cuando la estructura te dice que se terminó, es un valor agregado que tiene que ver de dónde proviene María Victoria”, agrega.

“Hago de madre de dos mujeres como tengo en la vida real. Una de ellas con retraso madurativo, como tengo en la vida real. Poder vincularse desde un lugar más igualitario, menos extra protector como el que ejerzo en la vida real me conmueve y por eso se genera ese vínculo de madre progre, canchera, amiga. A la vez también tengo padre y madre en la película, y estoy en medio de un combo muy entrañable”, termina. 

Por su parte, Laura Grandinetti comenta “a mí como personaje secundario, me gusta aportar desde mi lugar, pensando qué se cuenta de ella. Desde su adolescencia Anita tiene muchos sueños y en el encuentro con Miranda le dice muchas cosas. Hay muchos personajes femeninos, me gustaba y entusiasmaba trabajar con María Victoria, Inés, Lu”.

“Me dirigieron muchas mujeres, creo que soy parte de una generación en la que se puede ver y trabajar con mujeres que llegan. Particularmente cuando estoy entre mujeres soy un poco más feliz”, concluye.