MUBI - 8 Puntos

Crítica de "¡Al abordaje!" y la frescura de Guillaume Brac en una comedia generacional a lo Rohmer

El francés Guillaume Brac, un casi desconocido en estas partes del mundo y que gracias a la plataforma de streaming MUBI, se puede apreciar su obra, ofrece una comedia simple, fresca y original que recuerda al cine de Éric Rohmer.

lunes 09 de agosto de 2021

En ¡Al abordaje! (À l'abordage, 2020), presentada en la sección Panorama de la Berlinale, Brac explora con una frescura inusual en el cine contemporáneo reciente, gracias a un guion agudo y plagado de humanidad y sensatez, la diversidad (en el sentido más amplio de la palabra) de un grupo de veinteañeros franceses.

La hstoria ficcional, filmada como un documental, presenta a Félix (Éric Nantchouang) un muchacho que tiene un amorío en los muelles del Sena con Alma (Asma Messaoudene), una joven del sur de Francia. Félix no se resigna a no verla más y convence a su amigo Chérif (Salif Cissé) para que lo acompañe hacia el sur, entre Montélimar y Valence, donde ella pasa las vacaciones. Los dos amigos, que trabajan para pagar sus estudios, proceden de las afueras de París, y rara vez salieron de vacaciones, lo viven como la gran aventura de sus vidas. Édouard (Édouard Sulpice), un chico opuesto en todo sentido, que maneja un coche de alquiler para una de esas empresas que se contratan a través de una app, será engañado para que los lleve a destino. Pero, recién llegados al lugar, el auto se rompe, la sorpresa causa el efecto contrario al esperado en Alma, y los tres jóvenes se asientan en un camping hasta que puedan volver.

En su cuarto largometraje, Brac presenta la historia como un cuento infantil, simple y natural, sin giros improvisados ni la necesidad de recurrir a efectismos, un cuento realista donde la trama central no es más que la excusa perfecta para dejarse perder en las bifurcaciones. Resulta imposible no asociar ¡Al abordaje! con el estilo de su compatriota Éric Rohmer y el clásico Cuento de verano (Conte d'été, 1996), donde la comedia como género resuelve los conflictos dramáticos que surgen a lo largo de la trama.

Una cámara ligera deambula entre los cañones del río, la pileta, el bar del camping, las terrazas del pueblo, las bicicletas o el karaoke. De un protagonista a otro. Una cámara a menudo irónica, siempre oportuna, que invita al espectador a acompañar a éste trío en su viaje de iniciación y participar de sus aventuras.

8.0
Temas de esta nota
Te puede interesar
Últimas noticias
MÁS VISTAS