Crítica de "Ouistreham", un retrato sobre la explotación de Emmanuel Carrère

En este puerto trabajan mujeres y hombres que limpian los barcos, entre viaje y viaje. Durante una hora y media tienen que limpiar cabinas y baños con cuatro minutos por cabinas. "Es uno de los peores trabajos (muy duros y muy mal pagados) que solamente mujeres pueden hacer" como lo dicen las empleadas.

Esta situación escandalosa fue revelada por un libro escrito por Florence Aubenas, gran periodista francesa y muy bella persona. En 2005, Florence Aubena fue rehén durante cinco meses en Irak.

Su vida fue transformada desde aquel momento. Decidió hacer este trabajo clandestino sobre la vida de estas empleadas de la limpieza totalmente encerradas en este tipo de trabajo, un poco como lo hizo el periodista alemán Gunter Walraff en lo que toca al trabajo de los migrantes clandestinos turcos en Alemania. Walraff se dio de turco y entró en un mundo desconocido de miseria, explotación y violencia. Es lo que hizo en su propio país Florence Aubenas. Su libro documental tuvo un éxito muy grande y muy merecido.

Armar una película con tal historia es, en sí, un desafío casi imposible de desarrollar.

Fue Emmanuel Carrère, gran novelista y periodista investigador francés que decidió ponerse a cargo de tal trabajo. Todos los actores serían no profesionales y empleados en este tipo de trabajos. Solamente Juliette Binoche en el papel de la periodista–escritora e investigadora sería actriz profesional.

Esta estrella del cine francés, ya de gran experiencia se integró con mucha sencillez y modestia en este papel. No buscaron, ni ella ni el director, proveerle al personaje una linda cara o de “mater dolorosa” o de burguesa vestida al estilo popular. Ni las arrugas ni los círculos oscuros debajo de los ojos son de comedia. Corresponden a las noches sin dormir, a los apuros permanentes, y al cansancio que se adueña de los cuerpos rotos de mujeres muy jóvenes o envejecidas de anticipo.

En sus inicio, Ouistreham es una película coral, en la que hay varios personajes tan importantes los unos de los otros. Lentamente el círculo de vidas y amistades se aprieta, sobresalen unos y otros, debido a las tareas que les caen a estas mujeres. Unas limpian campamentos vacaciononales, otras oficinas durante la noche, otras ciertos tipos de fábricas. Los dueños  muchas veces las echan porque están hartas de ser tratadas peor que la m… y muy mal pagadas.

La periodista Mariana que vive y trabaja como todas ellas, consigue un coche muy viejo  y con este decide ir a trabajar en los barcos de Ouistreham. Se lleva con ella, compartiendo los gastos de gasolina, una mujer joven y madre de tres niños. Se vuelven amigas y esto da un giro a la película: ella se convierte en el personaje central de la historia.

De modo inconsciente, entramos en la historia de estas mujeres, no son estrellas de la pantalla pero saben comunicarnos sus emociones, tanto sus alegrías como sus momentos de furia. Sus sueños como sus desesperos. Son obreras muy mal pagadas a lo largo de sus vidas. Pero confirmó que cuando las vean actuar en la gran pantalla, van a dar se cuenta del inmenso talento que comparten con nosotros.

Esta película no está en competencia pero se lo hubiera merecido. Se parece un  poco a la de Ken Loach: Bread and Roses( 2000). Pero hay también un poco de la fantasía del Chaplin de Tiempos modernos (1936). Si bien el tema ha sido revisado en varias novelas o films a nivel internacional, el trabajo de Carrière es muy valioso.