Music

Music (Maddie Ziegler) es una joven autista que verá su mundo derrumbarse al fallecer su abuela. Sola, sin nadie que la asista, sus allegados, principalmente vecinos, debatirán sobre cómo podrá seguir adelante con sus estrictas rutinas, que incluyen un desayuno particular, un paseo por la ciudad, la visita a la biblioteca pública y soñar con tener algún día un cachorro. Hasta que las autoridades dan con Zu (Kate Hudson), su hermana, quien hace tiempo que no tiene vínculo alguno con la adolescente y que posee un curriculum plagado de infracciones, en todos los sentidos. A primera vista sería imposible que ella se haga cargo de la joven, pero claro está que esto es una ficción, y en el conflicto del contraste entre los dos universos, el de Music y Zu, se configura una valiente fábula sobre el amor al prójimo, que además enarbola banderas sobre la diversidad sexual, con una trama plagada de temáticas como violencia de género, enfermedades, que sostienen la tensión dramática y el verosímil de la historia.Sia avanza en la construcción de un relato diferente a partir del ingreso de Zu al mundo de Music, con todos sus defectos, debilidades y adicciones, y cuya principal virtud es reinventar los fragmentos musicales, rompiendo la continuidad dramática, pero de una manera positiva, para presentarlos de una manera completamente revolucionaria con puestas impactantes y coloridas e en estudio, con letras que aportan más información sobre el momento particular de las protagonistas y los personajes periféricos.A través de las canciones, que representan el universo interior de Music, Sia construye un alegato sobre la necesidad de entendimiento para con los demás, respirando en cada número originalidad, frescura, diversión, para también reflejar la verdad de cada uno de los coprotagonistas, seres angustiados por sus secretos y miedos, revelando que Music, de alguna manera, viabiliza la posibilidad que cada uno sea visto como en realidad es a través de la percepción de la adolescente.En la disrupción del tempo esperable del largometraje, los fragmentos musicales, plagados de coreografías, bailes y un espíritu libre, dan aire al agobiante relato ficcional, abriendo el juego a una propuesta lúdica, vanguardista, acorde a la personalidad de Sia y la carrera que la ha potenciado hasta el momento. Music deconstruye la fórmula de películas con protagonistas diferentes, pero también lo hace con el musical, los sobrevuela tomando elementos de ellos, pero reinventa la irrupción de la canción en la historia, dejando de lado la continuidad esperable y lógica para decir “esto se canta como en los clásicos, pero lo hago en otro espacio así, además, permito el lucimiento de los participantes y aggiorno todo”.Kate Hudson logra transmitir en cada escena la necesaria verdad para sobrellevar no sólo el encuentro que debe llevar adelante, haciéndose cargo de la joven, sino también para contar una historia de amor incipiente con Ebo (Lesli Odom Jr), el que, con algunos secretos, no sólo la acompañará para llevar adelante la difícil tarea de cuidar a Music, sino que, principalmente, le permitirá revertir algunas cuestiones negativas y tóxicas de su personalidad. Mención especial para Maddie Ziegler que aporta técnica y precisión a un rol exigente, que necesitaba verdad en las escenas dramáticas y en las musicales, cumpliendo en ambas con solvencia cada uno de los desafíos que este apasionante, distinto y original relato exigía.