Lost in Translation

#Tesigo

En la transformación de un hombre gris, adaptado a aquello que la vida le impuso, sin seguir realmente sus impulsos y deseos, #Tesigo (#JeSuisLa, 2019), del realizador Eric Lartigau (La familia Bélier), se propone como una lograda comedia existencialista que supera algunos cotos autoimpuestos que podrían haberla convertido en una pancarta moralista sobre la vida en la sociedad actual.

#Tesigo
miércoles 27 de enero de 2021
Stéphane (Alain Chabat) dirige un restaurant familiar al que le vendría muy bien un cambio de estilo, separado de su mujer, uno de sus hijos contrae matrimonio y ese mismo día se da cuenta que hay una información sobre éste que nadie le había dicho. Lartigau construye ese arranque con precisión, filmando el paso a paso de la puesta de la celebración y a partir del momento de la revelación otro ritmo se impone a la progresión narrativa.Para no quedarse sólo con la imagen de un hombre malhumorado por la falta de información o siquiera la poca complicidad con los suyos, el guion comienza a explorar los pasos que comienza a dar en una relación virtual. Algo nuevo para él y que lo emparenta con u una mujer llamada Soo (Bae Donna), en la exótica Corea.Así, #Tesigo hablará de aquellos puntos de quiebre en la vida de las personas en los que, necesariamente, se deberán tomar decisiones para o, asumir la verdad de un presente, o, quedarse atado al pasado y los mandatos, convirtiendo a Stéphane en un anithéroe al que comenzarán a pasarle muchas cosas, las que, independientemente de en qué decantarán, refuerzan el contexto narrativo y delinean al personaje de una manera multidimensional.Construida en una primera etapa como una comedia de enredos y confusiones, en donde el disparador de descubrir la bisexualidad de su hijo marcará un punto de inflexión para darse cuenta del lugar que ocupa para con los demás, logrando, desde la estructura dramática, tomar esa información para también modificarse junto con el protagonista. Con el correr de los minutos #Tesigo sale de la clásica comedia francesa coral, y se propone como una inteligente historia en donde varias generaciones aportaran su voz a un relato que posee una mirada ácida y mordaz sobre los vínculos, la familia, las amistades, el dinero, la tradición, sumando también una crítica sobre lo efímero de las redes sociales y aquello que empuja y tracciona en sus usuarios.Stéphane transita el impulso impuesto por la vida misma, por su convivencia con uno de sus hijos, por sus charlas con una de las encargadas del restaurant, que siempre llega tarde al trabajo pero que deja su vida entera en él, y cuando comienza a vislumbrar que su vida tiene que estar en otro lado, y de otra manera, sus rutinas diarias se modifican, al punto de querer conocer a aquella que a través de las redes lo incentiva a hacer cosas nuevas, pero no tendrá el resultado esperable.Rodada en escenarios naturales, con una división clara entre el adentro y el afuera, por momentos la cámara deposita su foco en Stéphane, en sus impulsos, para luego, en una segunda parte, hablar del extrañamiento de un escenario exótico para el protagonista, que lo emparenta a varias producciones que supieron reflejar el impacto de culturas pero que, en este caso, termina por posibilitar una esperanzadora oportunidad para hablar de redes de contención y apoyo ante la soledad en un espacio desconocido y distinto.
7.0
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