La lucha aún continúa

Desierto verde

Ulises de la Orden (Tierra Adentro, 2011 y Río arriba, 2005) documenta en Desierto verde (2013) la lucha de un pueblo afectado severamente por el uso de agro-químicos; el puntapié para una reflexión de aristas más complejas.

Desierto verde
miércoles 06 de noviembre de 2013
La cadena alimenticia es un proceso presente en la vida de todo ser vivo. Desde una perspectiva cultural, es un proceso complejo y tiene connotaciones políticas. Desierto verde parte del juicio que le iniciaron los damnificados de Ituzaingó, un pueblo cordobés, a los responsables de haber regado amplísimos campos de soja con peligrosos agromíquicos. Tan peligrosos que produjeron varias enfermedades (todas ellas muy graves), además de la muerte de un considerable número de personas. Pero, poco a poco, Ulises de la Orden amplía el panorama y pone en imagen una complejísima red económica, biotecnológica y política. Su trabajo hace foco en los modos de consumo de nuestra modernidad y las terribles consecuencias que generan cuando le dan la espalda al bienestar en pos de la rentabilidad.Desierto verde, en sus concisos 85 minutos, despliega merced a un riguroso montaje (no confundir con "efectista") una cantidad de voces que representan todos los estadios en la producción y los procesos de industrialización utilizados para la explotación de la soja, el "boom" económico de varios países (entre ellos, Argentina). Aparecen empleados gubernamentales, agentes educativos, militantes ecologistas, científicos. Un gran acierto: todos ellos de primerísimo nivel y de distintas procedencias. Si la concisión en los noticieros suele estar marcada por la fácil rotulación y el mensaje unidireccional, aquí se informa al espectador y se lo prepara para que él mismo analice el tema en cuestión. Impacta el dolor generado en el pueblo afectado, tanto en el juicio como en las secuencias de la vida cotidiana, y es indudable que no podría ser de otra forma. El realizador se cuida de no exponer pornográficamente el drama de estas personas y elige a modo de sinécdoque un grupo representativo de testimonios y, en especial, la historia de una niña que tuvo cáncer pero que -como advierten los médicos- tal vez pueda volver a enfermarse "mañana o en veinte años".Como antecedente mencionamos El mundo según Monsanto (Le monde selon Monsanto, 2008), otro implacable trabajo. Aquí, Marie Monique Robin (escritora del libro homónimo que antecedió al documental) aporta su mensaje. Tanto aquel film como éste ponen el acento en la avaricia de un sistema mucho más grande que rige el destino de la humanidad. Y ofrecen una nueva perspectiva de cambio, para que la alimentación mundial realmente sea un derecho respetado.
8.0
Te puede interesar
Últimas noticias
MÁS VISTAS