Héroxs del 88

Cada uno de los testimonios presentados por Díaz en las casi dos horas de duración del film son verdaderos hallazgos, no porque haya dado con Chuchu Fasanelli y Walter Kolm, promotores del compilado y de muchas de las carreras de los músicos que se posicionaron en el punk como artistas y como una manera de vivir, y los haya puesto a rememorar un año clave para Argentina, con militares queriendo volver al poder y una democracia debilitada por los embates económicos, al contrario, la mayor virtud de la propuesta es, a la distancia, vislumbrar el presente de esos personajes que rememoran con vivacidad, pero desde una actualidad que los aleja a unos del dogma anárquico que predicaban, y a otros, los sigue perpetuando en el paradigma.Fotografías, videos intervenidos, archivos, la palabra para recuperar el detrás de escena de un disco que, artesanalmente, y editado por dos jóvenes descreídos de la industria, supo sumar adeptos a lo largo de los años, convirtiéndose en los últimos años en una leyenda urbana, que Díaz termina por disolver. En Héroxs del 88 desfilan todos los protagonistas de ese momento, músicos, representantes, fanáticos, que transitaron la escena musical porteña sabiendo, casi intuitivamente, que estaban tras un proyecto que los ubicaría en un lugar privilegiado de la historia de la música local.Díaz entrevista, relata en off, desmenuza las páginas de los fanzines característicos de la época para encontrar información, y tras los descubrimientos, la pesquisa, la entrevista y la puesta en escena de personas/personajes que hoy cuentan un relato que escapa a lugares comunes, sondeando más y más para que la película configure, junto con Desacato a la autoridad, relatos de punks en Argentina, Capítulo 1 y 2, de Tomás Makaji y Patricia Pietrafesa, la enciclopedia audiovisual del punk en el país.Héroxs del 88 es valiosa por su información contenida, entretenida por un formato cuasitelevisivo, que hilvana testimonios, sin superponerlos, agilizando la narración con inserts, videos, fotos, pero, principalmente, por una facturación técnica impecable, la épica punk de Argentina alcanza en Héroxs del 88 un punto de referencia ejemplar, resultado de un director metódico, inquieto, ávido de datos y con mucho amor hacia su trabajo.