Habemus Jude Law

The Young Pope

La nueva película del realizador italiano Paolo Sorrentino es en realidad la suma de los primeros dos episodios de la serie de TV que ha creado para HBO: The Young Pope (2016), con Jude Law en el protagónico del (ficticio) Santo Pontífice y Diane Keaton en el papel de la monja que lo amadrinó de niño en un orfanato.

The Young Pope
sábado 03 de septiembre de 2016
El origen serial del proyecto se nota en el ritmo de las escenas, el montaje de las conversaciones, la velocidad con la que se introducen personajes y por sobre todo en todas las pequeñas inversiones de tiempo que no rinden nada a cambio, porque siembran lo que va a ocurrir dentro de otro episodio. El resultado es un tanto incompleto. Pero más allá de las deficiencias de la adaptación la película goza de grandes actuaciones de un talentoso elenco internacional (incluyendo a Silvio Orlando, Cecile De France, Javier Cámara y James Cromwell) y la maestral puesta en escena de Sorrentino. Si el film resulta insatisfactorio, al menos promete un buen show.La película/serie trata sobre Lenny Bernardo (Law), devenido en Papa Pío XIII luego de un polémico conclave en el Vaticano. En la primera imagen del film se arrastra a gatas de un cúmulo de bebés en el centro de la veneciana Piazza San Marco. Despierta: era un sueño. Emprende rumbo al palco papal durante un híper estilizada secuencia que introduce a la mayoría del elenco. En el palco arranca su primera homilía haciendo apología a la masturbación, el aborto, los contraceptivos, el matrimonio homosexual, etc. Y luego despierta: era otro sueño, o más bien una pesadilla.Lenny es un misterio, tanto para el espectador como para sus colegas. La mejor forma de describirlo sería decir que él y Pío XIII son dos personas distintas – que la película trata sobre cómo Lenny construye a Pío XIII a base del capricho y el cinismo, como si estuviera inventando un personaje para un juego de rol. Lenny no es un simple enfant terrible poniendo el Vaticano patas para arriba con irreverencias juveniles, como lo haría una película más obvia. Es un ser embriagado de poder que corre el peligro de creerse el mito que está construyendo entorno a sí mismo.Jude Law está excelente en el papel y lo encara con una sentida delicia por todo lo que dice y hace. Tiene un papel cómico en una historia que es ridícula pero no particularmente cómica; el humor siempre desvaría entre el error y el acierto. El primer chiste de la película es mostrar cómo unos cardenales se desmayan ante la escandalosa mención de la homosexualidad, el tipo de gracia al final de una tira de Condorito. Las risas se las reparten entre Jude Law y el sufrido cardenal Voiello (Orlando), que básicamente es el hombre serio en un dúo cómico.El film “concluye” cuando Lenny se anuncia finalmente al mundo y lanza su primera homilía. La conclusión – y en particular el último plano, harto melodramático – tienen todo el aire del final de un piloto de TV. Una serie a base de intriga, crítica, ironía e indulgencia. Esto es lo que Paolo Sorrentino promete con su película.
8.0
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