Crítica de "Michael Clayton": George Clooney sostenido en la actuación

Clooney interpreta a Michael Clayton, un hábil negociador de un prestigioso estudio de abogados en Nueva York. Aunque no es abogado, Clayton se encarga de los asuntos turbios de los clientes. Cuando el abogado estrella de la firma se encuentra en medio de un escándalo público, Clayton es llamado para resolver la situación y salvar a la firma de la bancarrota.

La película se desarrolla a través de un largo flashback que comienza en un punto crucial de la trama y luego se desvía por diferentes caminos antes de regresar al punto de partida. Sin embargo, esta estructura narrativa puede resultar confusa para el espectador y la trama, a veces, se torna innecesariamente larga. Además, las historias paralelas que se entrelazan a lo largo de la película pueden distraer del eje principal de la historia.

La mayor fortaleza de la película reside en la actuación de George Clooney, quien sostiene el peso del film con su presencia continua en pantalla. Su personaje se debate entre el deber y el hacer, agregando capas de complejidad a la trama. Sin embargo, otras interpretaciones, como la de Tom Wilkinson, quien interpreta a un abogado maníaco depresivo, rozan la sobreactuación y pueden resultar excesivas.

Michael Clayton se apoya en la actuación destacada de George Clooney pero,  a pesar de ello, no logra escapar de una trama confusa y algunas interpretaciones exageradas.