Australia

Baz Luhrmann no dudó a la hora de encarar este megaproyecto llamado Australia en agasajar al cine; ya desde la primera toma nos remite a Lo que el viento se llevó, para adentrarnos en un homenaje casi constante a los grandes clásicos de Hollywood (y no tantos), así con al transcurrir de los minutos pasarán por nuestras mentes escenas de Lawrence de Arabia, El Mago de Oz y hasta un pequeño pero merecido tributo a la Dogville de Lars Von Trier con la también protagonista Nicole  Kidman, en un plano senital memorable,  donde la ciudad es vista como si fuera un llano de la representación en si misma.Australia es una sola película de 165 minutos de duración, pero claramente se divide en dos segmentos: el primero que antecede a la segunda guerra mundial y una segunda parte que se manifiesta dentro de la misma guerra. La trama no es mas que una simple historia de amor entre una dama inglesa que viaja a Australia para hacerse cargo de una herencia, interpretada por la cada vez mas sorprendente y versátil Nicole Kidman,y el personaje de Hugh Jackman personificando a un arriero algo tosco, pero que sin duda logrará seducir a la “bella dama”; como trasfondo un niño mestizo huérfano (mitad indio-mitad blanco) capaz de conquistar el corazón de la pareja y obviamente de los espectadores, quien será el encargado de relatarnos la historia desde su propio punto de vista.Luhrmann juega constantemente con la historia australiana pero modifica la estructura para transformarla en un despliegue visual inusitado, - la única forma de apreciar la magnitud de su cinematografía es en un cine, abstenerse a verla en DVD, si lo que quiere es disfrutar de toda la capacidad del relato- donde la fotografía delimita ambas historias. El uso de colores saturados contra los grises opacos de las escenas de la guerra perfila claramente un díctico donde una sola historia se bifurca en dos ramas, que bien podrían ser infinitas. El montaje alternado y veloz de las escenas, le imprime el ritmo necesario para así evitar desmoronarse en el estancamiento de la historia, brindándole el dinamismo que esta necesita.Si hay algo que el cine de Luhrmann nos tiene acostumbrados es a la excelencia de la reconstrucción de época, sin dejar nada librado al azar, la dirección de arte como también el vestuario están cuidados hasta los más mínimos detalles, sin caer en estridencias, conjugan cada momento de la historias sin tomar protagonismo, pero formando parte de la misma.Australia, es sin duda el regreso triunfal de uno de los más grandes creadores que dio el cine contemporáneo en los últimos tiempos, una obra magistral, elocuente, tan grandiosa como voraz. La gran película de un 2009 que recién comienza y como no podía ser de otra manera con un cine que se homenajea a si mismo. Imperdible!!!!!